Conoce mi Nuevo Proyecto

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No trabajes por dinero, trabaja por libertad



El titulo de este artículo puede sonarle extraño a la mayoría de las personas, pues lo normal es trabajar tantas horas a la semana por un cheque, o tener un “negocio” donde hay que abrir y cerrar todos los días. Lo de la libertad puede sonar aun peor, puesto que mientras más se escala en la escalera corporativa o empresas tradicionales menos tiempo libre se tiene.

Sin embargo, precisamente por trabajar duro por dinero es que perdemos nuestra libertad. Si el trabajo duro fuera la solución, los burros fueran ricos. Entonces, no trabajes por dinero, sino por crear activos que produzcan dinero. Un activo es algo que genera dinero en tus bolsillos, independientemente de tu presencia. Por eso es que trabajar por activos se llama trabajar por libertad. Si tenemos tres edificios de 10 apartamentos cada uno, de los cuales generamos USD$500 por cada uno, serian 3x10x500= USD$15,000 de flujo de efectivo mensual, independientemente de nuestra presencia.

A la mayoría de las personas les agrada la idea, pero lo consideran que es imposible o que toma demasiado tiempo. Sin embargo, trabajan por 45 años en algo que no le genera ningún activo, pero no parecen considerar que esto sea mucho tiempo. ¿Irónico, no es así? Por eso es que tantas personas fracasan en las redes de mercadeo y dicen que no funcionan, pues vienen con la mentalidad de empleado pensando en lo que van a ganar en su primer mes, en vez de pensar en lo que van a ganar toda la vida. La mayoría de las personas trabajan duro para crearle un activo a otro, pero nunca crean el suyo.

Entonces, ¿trabajar por dinero o trabajar para crear activos que produzcan dinero y nos den libertad? La primera opción la hace la mayoría y nunca llega a ser rica y a veces ni siquiera tener una vida decente, y si acaso la consiguen son esclavos de ella. La segunda permite enriquecerse y tener libertad para hacer lo que más nos guste. ¿Tú cual prefieres?

Todo el mundo puede


Este es un artículo escrito en conjunto para el Blog de Miguel Ceballos y Piensa en tu Futuro.

Todo el mundo puede ganar en la vida, pero no todo el mundo lo hará. Recientemente, a pesar de ser una persona tranquila y reservada, me he incomodado un poco de escuchar a tantas personas con mentalidad negativa, que siempre andan quejándose y buscando excusas de por qué unos pueden ganar y otros no.

Es como si realmente hay personas que creen que hay personas que nacieron para ser ganadores y otras para ser perdedores. Eso me da tanta pena y a la vez me molesta un poco, porque no entiendo cómo podemos ser tan mediocres a veces. El mundo está lleno de historias de personas que de la pobreza se han levantado a la riqueza, y otras de que de la riqueza han ido a la bancarrota. Aun así, hay personas que todavía creen que el lugar donde naciste determinará donde estarás mañana. Nada más lejos de la verdad.

La justificación del perdedor



¿Cuál es la justificación del perdedor? Que es lo que dice el que no triunfa en la vida para justificar por qué otro tuvo éxito y ellos no? Las excusas se resumen en una palabra: “suerte”. Eso fue porque el otro tuvo suerte, porque lo ayudaron, porque la apareció una oportunidad que a mí no. Todas esas son excusas baratas de fracasados, y ahora explicaré por qué.
 
Una vez se hizo un experimento. Había un grupo de monos en una jaula. En la parte superior había un racimo de bananos. Los monos obviamente intentaban subir a buscar dicho racimo, pero rápidamente eran atacados con una manguera de agua fría a presión. Cada vez que intentaban subir, hacían lo mismo, hasta que los monos finalmente desistieron. Luego introdujeron nuevos monos que no sabían lo que había pasado. 

Cuando hay Fe en el Futuro hay Fuerza en el Presente



Les invito a escuchar mi segundo video-articulo. Nada que ver con mis charlas que imparto a grupos jejeje. Este sencillamente es un video casero, como alternativa a la escritura, sobre un tema muy importante en el logro del éxito y la felicidad.

Cuando hay Fe en el Futuro, hay Fuerza en el Presente, es el título de este artículo basado en las enseñanzas del empresario y maestro en crecimiento personal, Luis Costa. ¡Es un video muy corto que espero que disfruten y que le aporte positivamente a su vida!




Razones o Excusas



“La pobreza y las excusas son intimas amigas, se adoran en la oscuridad
José Bobadilla
 
David Schwartz, en su libro “La Magia de Pensar en Grande”, define a la “Excusitis” como la enfermedad del fracaso. El éxito y las excusas son mutuamente excluyentes, son como el agua y el aceite hirviendo, no se mezclan, son extremos opuestos. Quienes ganan en la vida simplemente no se ponen excusas. Los fracasados siempre tienen una “razón lógica” (según ellos) de por qué algo no puede hacerse y como consecuencia no lo hacen, y por eso fracasan.

“La línea entre las razones y las excusas es muy fina. Unos dicen que no pueden iniciar un negocio por falta de dinero, mientras otros inician un negocio por falta de dinero”
Miguel A. Ceballos

Todos quieren tener pero pocos quieren hacer



En el pasado artículo Cómo obtener mejores resultados en la vida explicaba que los resultados actuales que tenemos en nuestra vida se deben a los hábitos que hemos desarrollado, que a su vez dependen de las acciones que tomamos y que dichas acciones son producto de nuestra forma de pensar. En conclusión, para cambiar los resultados que tenemos, debemos de cambiar nuestra forma de pensar.

Sin embargo, a pesar de que todo esto hace mucho sentido, la gran mayoría de las personas piensan obtener mejores resultados en su vida a base de “magia”, es decir, pensando igual y haciendo lo mismo, y a veces peor aún, sin pensar y sin hacer nada. Todos quieren tener pero pocos quieren hacer es una cultura que está a la moda. Nos quejamos mucho de la pobreza, y de que hay ricos que no le dan a los pobres, pero precisamente esa mentalidad mediocre de que una persona espere que otra le regale lo que ella se puede ganar por sí misma es lo que causa pobreza.

Lechugas y Manzanos: Educación Financiera



Este ejemplo de lechugas y manzanos lo he usado en algunas de mis charlas sobre Educación Financiera. Es sacado de la videoconferencia ¿Por qué un árbol rojo? y el libro de Mario Rodríguez Padres.

Las lechugas son plantas cuyo tiempo de cultivo por lo general varia de entre 20 y 65 días. Tienen la gran ventaja de que es una forma rápida de cultivar alimentos. Tienen la desventaja de que cada vez que se da una cosecha, se debe volver a sembrar para obtener otro. Los manzanos, o naranjos, o cualquier tipo de árbol frutal grande tienen la desventaja de que toma varios años en crecer el árbol. Sin embargo, tienen la gran ventaja de que luego de que crecen dan frutos para toda una vida.

¿Qué tiene esto que ver con educación financiera? Tiene que ver todo. La mayoría de las personas trabaja como si sembrara lechuga. Hace un trabajo y cobra cada semana, quincena o mes. Mientras siga trabajando o sembrando lechugas, va a recibir su paga, pero el día que no lo haga, deja de recibirlo. Esto se llama ingreso lineal. Sembrar árboles de manzana es trabajar sin un ingreso fijo creando un activo económico. El día que dicho activo o manzano esté creado, recibirá frutos para toda la vida. Esto se llama ingreso residual o ingreso pasivo.