“Si me hago caso a mí
mismo terminaré como yo”, es
una frase muy usada por el empresario Sergio Rivera. Es una frase profunda que
vale la pena analizarla a fondo, y que tiene que ver con las personas que
escuchamos y las personas a las que les pedimos consejos en nuestra vida.
Probablemente
has oído que somos en el presente el producto de las decisiones que hemos
tomado en el pasado, al igual que el producto de las relaciones que hemos
tenido y de lo que hemos visto o leído. Por tanto, es obvio que si nos
escuchamos a nosotros mismos, seguiremos siendo lo mismo que hemos sido. Es
decir, que si seguimos pensando cómo
hemos pensado y haciendo lo mismo que hemos hecho, seguiremos teniendo los
mismos resultados. Pensar lo contrario es locura según Albert Einstein.
El
problema viene cuando usamos ese instinto de soberbia e ignorancia (combinación
fatal) que a veces tenemos, y nos creemos sabedores de todo. Nos llegamos a
creer autosuficientes porque tenemos una maestría o un trabajo en qué se yo que
lugar, y pareciera que en vez de caminar levitáramos sobre el aire. Este es el tipo de personas que más
errores comete en su vida. Su vida tiende a ser un desastre financiero,
emocional, en relaciones, y prácticamente en todo lo que hagan, ya que, como
ellos son tan buenos y saben tanto, ¿Por qué habrían de aprender de otra
persona?
A
veces nos ocurre algo quizás peor. No sabemos nada, admitimos que no sabemos, y
decidimos buscar consejo. El problema es, que en vez de buscar consejos de personas exitosas y que saben lo que
hacen, ¡buscamos el consejo de alguien que esté igual o peor! ¿No han visto
ustedes personas con problemas de pareja o problemas de dinero aconsejando a
otras personas sobre relaciones de pareja y dinero?? Que alguien me explique,
porque yo en verdad que no entiendo. En ocasiones yo mismo he pedido estos tipos
de consejo, y no es extraño los resultados que han venido luego. Antes de dar algún
consejo, deberíamos al menos investigar o leer un libro de alguien que en
verdad sabe del tema.
Es
necesario que entiendes, que tú y yo NO somos autosuficientes. Si tú y yo supiéramos como vivir mejor,
hace tiempo que viviéramos mejor. Si no lo hemos hecho es porque no sabemos
cómo o no hemos hecho lo que tenemos que hacer. Por tanto, tenemos que aprender
que hacer y cómo hacerlo de quienes saben, no de los fracasados, negativos, cínicos
e infelices de la vida que andan dando malos consejos para que más personas
sean como ellos. Lee, asóciate y escucha de personas de éxito.
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